jueves, 25 de mayo de 2017

Alex

El poema
no se ha acabado
hasta que tú lo leas,
hasta que tus ojos
disquen mis letras
y a contacto con ellas
te mueras ahí
y termines los versos
de una vez

Ya nada me recuerda a ti,
ya nada te hace partícipe,
ya nada estás no ahí,
ya nada calla mi vicio,
ya todo radica en vos

Ya me miras
con tus gigantes ojos
desde el asiento de al lado,
te percibo
y te miro,
luego de un rato
ya no estás
y has vuelto
a ser la desconocida de al lado,
esa que yo imaginé
en otra persona

Me acaricias la mejilla
cuando reposo mi rostro en la ventanilla,
helada te encuentras
y te siento,
y ya no eres tú,
eres el vidrio inerte del bus,
eres ya ese vacío cristal
que tiende a reflejarme

Te escucho
pero no quiero saber
que es la radio
y una canción del Flaco,
pero te escucho
y más
eres tú

Semicorcheas toca Spinetta
y se acelera mi pulso,
cada vez
me hablas más

Semicorcheas encorazonadas
te dirijo en silencio
y con vibrato

Bajo
y me rozas la espalda
cual gota es
la que cayó por ahí,
sacudiome
las vértebras
con el rociar de tus gotas
cristalinas
como tu alma

Te acaricio
aunque quizás
solamente
lo sienta el viento
que besa mi cara
y proclama
tu bestial presencia

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